Experiencia en bodega Casa de Uco

Recuerdo de una experiencia muy hermosa en Mendoza en donde se tomó y se comió, pero también hicimos turismo que pocos hacen.

Estas son unas fotos de un fin de semana que pasé en Casa de Uco de un fin de semana en donde turiesteamos con unos chicos amigos que tienen una vineria muy linda por Devoto y los habían invitado de un par de Bodegas, y esta a donde fuimos tienen un hotel entonces nos fuimos para allá. Nos hospedamos ahí e hicimos una muy rica cata y los días siguientes fuimos a otras bodegas más chicas pero esta creo yo una de las más lindas y más ricas que hay.

La bodega es realmente un hotel 5 estrellas pero petit. Me sorprendió un poco el nivel de excelencia del lugar siendo que se dedican a la elaboración de vinos pero se dieron cuenta y eligieron también proponer para el turismo una especial propuesta hotelera muy alta gama con la posibilidad de tener experiencias hermosas en torno a la finca pero no solo es vino.

Entre algunas de las propuestas que hicimos fue una excursión de cabalgata saliendo de la finca y adentrándonos en las montañas de la cordillera. Con un montón de cosas que llevamos y llegamos a un lugar increíble en donde desmontamos y ahí nos pusimos a comer y tomar vino. Nos contaron sobre unas historias andinas que crecieron allí y estuvimos en contacto con la naturaleza muy hermosamente.

Otro de los días fue la cata que tuvimos en donde como en la mayoría, las catas incluyen una recorrida por los viñedos contándonos sobre las diferentes uvas que tipos de vinos se hacen y los diferentes tipos de cosecha que tienen. Algunas son variadas y según la uva cambia el tipo de cultivo otras bodegas hacen todas las uvas con el mismo tipo y después las formas de producción y guarda.

En esta ocasión, además de hacer eso tuvimos una cata con comida y una gran mesa en donde nos esperaban con unas mesas enormes con un parrillero que lo ame quien nos sirvió de las mejores carnes que comí jamás. Lo cierto es que además de ir a ver otras bodegas, esta tenía todas las comodidades y me pasó algo atípico. Fue la primera vez que me dieron ganas de quedarme en un solo lugar y no querer salir a hacer otra cosa.

Soy de esas personas que no ve como una vacación ir a un all inclusive, y con en este lugar al ser tan agradable atenderte en todos lados tan bien, la comida, los paisajes, la piel viendo la montaña fue una hermosura todo.

Disfrutamos tanto y les agradezco un montón a mis amigos por invitarme porque la verdad no tenía en mi mente el viaje y hoy esos gestos valen un monton.