Recuerdos de vacaciones en familia
Esto es un recuerdo de cuando uno se va de viaje a un lugar en donde se siente bien en calma y en donde todo se acomoda y vuelve a su lugar. Me acuerdo haber estado ahí con familia (Abuelos, padres, hermano y cuñada) en unas cabañitas yo con la abuela, mis viejos por otro lado y mi hermano con su mujer por otro. Con mi abuela nos hicimos mucha compañía pero lo que teníamos era una comunión como si habíamos vivido juntos. Ella entendía mis tiempos, yo los suyos y eso generó en mí una calma especial. Entre tener la paz de este lugar y la compañía de mi abuela estaba en un estado de paz absoluto. La sensación de sentir libertad para hacer y al mismo tiempo la seguridad y la paz de que había alguien por cualquier cosa no sabría bien como explicarla pero fue lo que me hizo sentir diferente y querer recordar esto con ustedes y conmigo.
El mate de mi abuela. Mi termo
Las mañanas se disfrutaban mucho muchas veces diría que la mayoría de ellas mi abuela me esperaba con el mate para cuando me levantaba e irnos a la entrada de la cabaña a tomar unos mates. Apenas, nos sentamos nos quedamos un rato en silencio escuchando el ruido de los pájaros y el viento que hacía resonar las copas de los árboles, pero también atrás del complejo había una cascada hermosa a donde se podía ir a bañarse y pasar el dia y desde nuestra cabaña que era la más cercana se podía oír el sonido del agua.
Muchas veces cuando tenían ganas de hacer alguna excursión y mi abuela no tenía ganas nosotros armamos un mini picnic y nos íbamos al arroyo con la abuela a pasar el día. No eran todos los dias porque sino íbamos a quedar como dos mala onda que estaban solos todo el dia, pero creo que lo hicimos unas 3 o 4 veces con la excusa de que mi abuela era grande y se había cansado del dia anterior la teníamos de comodín jajaja y era todo digitado por nosotros la noche anterior. Acá podíamos pasar largas horas sentados hablando mucho y ella me contaba historias repetidas que me encanta escucharla porque al ir recordándoles yo la veía como se sonreía por lo que me iba contando y lo bien y feliz que había sido por la anécdota y era muy lindo verla así.
Un día fuimos a una ¨¨Playa¨ que estaba ahí cerca, y digo playa porque así le decían los pueblerinos y fuimos todos juntos ese lugar recuerdo que nos encanto. Cuando nos levantamos ese día con mi viejo fuimos a comprar fiambres a un lugar ahí cerca en donde tenían una cantidad de embutidos increíbles y de los mejores que comí alguna vez. Volvimos al predio, armamos los sanguchitos y preparamos todo y nos fuimos para allá. Por suerte ese día nos tocó un gran día y era ideal para estar en el agua y eso fue lo que hicimos. Estuvimos todo el día en el agua.
Pero lo que más le gustaba de todo el viaje era el jardín del predio. Fijense en el fíjense en el fondo de la primer foto hay una tranquera, alla atras habia un jardin lleno de flores hermosas que mi abuela estaba enloquecida con sus colores y siempre pedía irse para que las miremos le sacamos unas fotos y yo la malcriaba en todo. Me encanta malcriar a mi abuela, siento como que le estoy devolviendo los mimos que me hacia ella a mi.
Espero que les haya gustado este recuerdo de unas vacaciones con la familia.
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